Su maestra Bernardina Fernández despertó en Llorens la vocación por el magisterio. Bernardina tenía una escuela privada, donde Antonia comenzó a desempeñarse como maestra auxiliar en 1893.

En 1897 abrió una escuela privada, donde ejerció como directora hasta 1900.

Formó parte de la Escuela de Verano de Harvard entre julio y agosto de 1900. Viajó en el “Sedgwick” una embarcación militar que transportó solamente a mujeres y en la que se encontraba también Alexis Everett Frye, Superintendente de Escuelas de Cuba.

El Museo Municipal de Consolación del Sur atesora el diario personal de Antonia. En esas memorias plasmó algunas vivencias del histórico viaje a los Estados Unidos. En las primeras páginas escribió: “Mr. Frye va muy animado y dice que se siente orgulloso de su empresa. Por nuestra parte creo que tenemos mucho que agradecerle, pues durante la travesía no ha tenido él para con nosotras más que atenciones y cariño”.

Al regresar de los Estados Unidos trabajó en una de las ocho escuelas que se abrieron en su natal Consolación del Sur. Entre 1901 y 1903 aprobó los exámenes de Maestros de Certificado y fue designada por el superintendente provincial de Pinar del Río como Juez Calificador de maestros y aspirantes.

En 1902 trabajó como profesora auxiliar en la Escuela Práctica Anexa a la Normal de Verano de Pinar del Río. Su labor en Consolación del Sur continuó y en agosto de 1903 fue ratificada como maestra del Aula No. 1, de la Escuela No. 1 de esa ciudad. Ese mismo año la dirección de la Escuela de Verano de Guanajay reconoció su labor en la Escuela Práctica Anexa.

El 3 de julio de 1907 contrajo matrimonio con el maestro Francisco Rodríguez Contreras, unión que duró hasta 1938, año en que falleció Rodríguez.

En 1911 fue nombrada Directora de la Escuela No. 1 de Consolación del Sur. Desarrolló varias iniciativas mientras ejerció el magisterio, como uniformar a todos sus alumnos y las meriendas colectivas. En 1930 Llorens recibió la Medalla de Oro por los 25 años dedicados a la educación y en 1931 la distinción anual de la Asociación Económica de Amigos del País.

Fue invitada en 1936 a eventos nacionales sobre la educación y el 28 de enero de 1942 recibió el título de “Hija Benemérita” por sus servicios dentro del magisterio en Consolación del Sur. En ese encuentro se encontraba Ramiro Guerra, con quien siempre mantuvo una estrecha amistad.

Después de 51 años dedicados a la educación cubana, Llorens se jubiló en 1944.

En 1946 realizó una donación de libros a la escuela que dirigió y los maestros decidieron nombrar la Biblioteca “Antoñica Llorens”, como cariñosamente la llamaban.

Falleció a los 96 años, el 30 de septiembre de 1968 en Consolación del Sur, Pinar del Río.

Bibliografía:

1. Alonso Echevarría, Carlos Mario y Portela Lara, Adelaida: Antonia Llorens Ubieta. Una educadora de la seudo-república, Filial Provincial de la Asociación de Pedagogos de Cuba en Pinar del Río.

2. Diario de Antonia Llorens encontrado en el Museo Municipal de Consolación del Sur, Pinar del Río, Cuba.